Powered By Blogger

lunes, 30 de julio de 2018

Pereza.

Esta tarde noche esperando el autobús en la parada estábamos una señora, yo había llegado el segundo y un grupo de dos chicas y un chico quinceañeros los ultimos. Cuando hizo su aparición el autobús nos fuimos acercando a la zona donde iba a ir la puerta de entrada. Las chicas esperaron hasta que paró para dejar el chico e intentar entrar las primeras. Me puse macarra y subí antes que ellas sin decir nada pero ocupando el espacio. Me atropellaron por el pasillo. Literal. Me voy a la plataforma y veo que una de ellas desesperada intenta abrir la ventana de atrás y no puede. Solo han subido las chicas. Por fin cuando el autobús ya lleva un trayecto de más de 50 metros consigue abrir la venta y veo que tira algo. Sospecho inmediatamente que es el abono. Se pone a hablar con el chico por teléfono indicándole por donde ha tirado el abono. Se baja a la cuarta parada.


Oliverio.

No hay comentarios: